A) La rutinización de las prácticas profesionales: Es una costumbre o
un habito que se adquiere al repetir una misma tarea o actividad muchas
veces. La rutina implica una práctica que, con el tiempo, se
desarrolla de manera casi automática, sin necesidad del razonamiento.
B) La descoordinación
de los profesionales: Saber
que se pretende, que pasa con lo que se hace para alcanzarlo y como habría que
cambiar para mejorar las prácticas.
C)
La
burocratización de los cambios: Cuando los cambios (impuestos o autónomos) se
convierten en trámites burocráticos.
D) La supervisión temerosa: Si quienes tienen la responsabilidad de supervisar las
escuelas no ven con buenos ojos la innovación. La máxima aspiración de las inspecciones es: que no haya problemas.
E) Dirección gerencialista: A medida que se fortalece el poder de decisión
unipersonal, se hurta la capacidad de intervención en las decisiones del
profesorado. Este hecho conduce a que quien tiene las soluciones es el
poder o a la contestación permanente de los abusos de autoridad.
F) La centralización
excesiva: Los
profesionales de la enseñanza se convierten en meros ejecutores de prescripciones
externas. Si no hay capacidad de innovar, de reaccionar planificadamente a los
cambios internos y externos, la organización perderá la oportunidad que se le
ofrezca y se encontrara sometida a los cambios externos e internos.
G) Masificación de alumno: La
masificación dificulta la atención a la diversidad. La masificación en el tamaño del centro también hace más
difíciles las relaciones entre las personas.
H) La desmotivación del profesorado: La motivación
del profesorado es elemento básico para el
desarrollo de una acción de calidad. Si no hay motivación (docentes) no se entregaran en
cuerpo y alma a la profesión y no disfrutaran de sus dimensiones.
I) Acción sindical reivindicada: Si centra su atención en la mejora de las condiciones de trabajo, descuida
la mejora de la calidad de un servicio a los ciudadanos. La mejora de las
condiciones ha de conducir al mejor desempeño de la tarea.
Miguel Ángel Santos Guerra.
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